Doce bordadoras de la agrupación «Tejiendo Redes» participaron en la creación de un bordado colectivo. La obra narra la historia de la comunidad de Nueva Pantanosa, un sector intervenido desde 2021 por el programa «Quiero mi Barrio» del Ministerio de Vivienda y Urbanismo. El proyecto contó con el apoyo del municipio de Frutillar y el Consejo de Desarrollo Vecinal del barrio, y se presentó en el Centro Comunitario de la zona en el marco de las actividades del Mes de las Mujeres, promovido por el Gobierno de Chile.
La obra se presenta en la Sala Molino del Centro de Arte Molino Machmar (CAMM), en el contexto de la convocatoria de Talento Local 2025. Para Verónica Astudillo, directora de arte y contenidos del CAMM, la exposición es un ejemplo claro del objetivo del centro: «Visibilizar propuestas creativas con identidad local y alto valor artístico. Este trabajo no solo tiene un valor artístico, sino también simbólico, al reflejar la memoria y el sentido de comunidad de quienes han vivido en el barrio a lo largo de los años”.
Las bordadoras trabajaron durante casi siete semanas, dedicando alrededor de cincuenta horas para dar forma a la obra. A través del bordado, cada una de las participantes plasmó sus recuerdos y vivencias de la infancia o adultez en el barrio. Usaron materiales reciclados como hilos, telas y acuarelas, y el proceso fue acompañado de risas y conversaciones sobre sus memorias compartidas. Berta Rojas, una de las bordadoras, recuerda cómo nació el proyecto: «Esto comenzó el 8 de marzo con un café y todas nuestras compañeras. Lo que bordamos fueron las casitas de nosotras. Cada una hizo su dibujo de sus recuerdos. Yo dibujé el pozo lastre porque me recordó a mi papá Sigifredo Rojas, cuando íbamos a buscar lastre. Cada una de nosotras dibujó una partecita, y me siento muy orgullosa de lo que logramos».
Por su parte, Isabel Vargas expresa su gratitud por poder participar en este taller: «Me gusta mucho el taller. En mi tiempo libre lo dedico a bordar, y con mis compañeras compartimos todo. Este proyecto es un bonito recuerdo de nuestro barrio antiguo. Al igual que Berta, también tengo recuerdos del pozo lastre, porque cuando niña íba con mi hermana a sacar arena y también recogíamos fierros o maderas para armar nuestra cerca de la casa».
Para las bordadoras, la obra representa mucho más que un trabajo artístico. Es un símbolo de la identidad y el esfuerzo de la comunidad, que ha mantenido viva la memoria del barrio. Oly Comen, otra de las participantes, comenta: “El esfuerzo y la paciencia del grupo fue enorme. A veces trabajábamos hasta la noche, pero lo hicimos con mucho cariño, porque queríamos que este bordado reflejara nuestra historia”.
«Juntas Bordamos Historia» es un tributo a la historia de Nueva Pantanosa, a través de las manos y los recuerdos de quienes han tejido la trama social de este barrio. La obra invita a reflexionar sobre la importancia de valorar nuestra comunidad, el trabajo colectivo y el arte, especialmente realizado por mujeres y grupos de adultos mayores, ya que, a través de sus obras, no solo se preserva la memoria colectiva de comunidades y generaciones pasadas, sino que también se reconoce la inclusión y el protagonismo de quienes, a menudo, son invisibilizados en el ámbito artístico.
Información periodística: Ignacia Maldonado, periodista del Centro de Arte Molino Machmar. Contacto: comunicaciones@molinomachmar.cl
 
 
 
 
 
